jueves, 29 de enero de 2015

Cómo cuidarnos tras una extracción dental

Higiene Evita cepillar los dientes las primeras 24 horas y evita tocar los tres primeros días la zona de la operación porque esto puede alterar la cicatrización. Después cepíllate con mucha suavidad también dicha zona. La limpieza y la eliminación de restos de comida y placa bacteriana es la mejor garantía para que la encía cicatrice rápidamente. 


Inflamación y dolor A veces, puede producirse un hematoma y es natural sentir algo de dolor después de cualquier cirugía en la boca. Puedes tomar los comprimidos homeopáticos Traumeel durante los primeros días para regular la inflamación y el dolor. Después de la operación puedes sentir cierta dificultad para abrir la boca por la inflamación de los músculos de la masticación. Aplicar bolsas con hielo sobre la zona de la cara correspondiente a la zona operada durante las primeras horas disminuye la intensidad de la inflamación y alivia las molestias.

Evita escupir y enjuagar la boca el primer día para prevenir que se disuelva el coágulo de la herida y el sangrado.  Después de ese tiempo, enjuágate suavemente con agua del mar o agua templada y sal (media cucharadita de sal en un vaso de agua templada) cada cuatro horas. Después de la cirugía es normal tener un poco de hemorragia, por eso, debes apretar fuerte la gasa doblada en la zona haciendo presión durante 30 minutos y luego retirarlo con cuidadoSi hemos colocado sutura, te citaremos para retirar los puntos en unos 7 días.

Dieta Es importante tomar gran cantidad de agua. Se debe esperar un par de horas tras la extracción dental antes de ingerir comidas. 
El día de la cirugía se recomienda comer alimentos templados y fríos y después del primer día mantener una dieta blanda, alcalina y ecológica. Unos días antes y después de la cirugía sería bueno ingerir alimentos ricos en antioxidantes como frutas (manzanas, fresas...), verduras, frutos secos, legumbres, etc.

Descanso Es importante tomar reposo  durante las 24 horas siguientes a la cirugía y no realizar esfuerzos físicos (levantar peso, deportes). Durante la primera noche después de la cirugía evita permanecer tumbado. Para eso, puedes colocar dos almohadas para dormir, teniendo la cabeza más alta que los pies y de esta manera, evitar en gran parte la inflamación de la zona quirúrgica.

No se debe fumar durante las primeras doce horas puesto que irrita los tejidos operados y retarda la cicatrización. No se debe ingerir bebidas alcohólicas.

Nosotros estamos para acompañarte en estos procesos, así que, no dudes en llamarnos a la consulta si tienes un dolor excesivo, presentas un sangrado que no puedes controlar mordiendo una gasa durante media hora o si tienes una inflamación que va en aumento después del tercer día de la operación. 




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